sábado, 24 de diciembre de 2011

Nota técnica sobre el ruck. Delanteros ¡muy importante!


LOS HABITANTES DEL RUCK
El Ruck o mele abierta se define según el reglamento de la IRB como una fase del juego donde uno o más jugadores de cada equipo, que están sobre sus pies, en contacto físico, se agrupan alrededor de la pelota que está en el suelo. El juego general ha terminado.
Los jugadores están ruckeando cuando están en un ruck y utilizan sus pies para intentar ganar o mantener la posesión de la pelota, sin ser culpables de juego sucio.
Para un observador que no entiende de rugby (o incluso para un tres cuartos), no es más que un amontonamiento desordenado de jugadores en torno a un balón pero la realidad es que es una fase del juego perfectamente normalizada, es la jugada que genera más golpes de castigo (y por lo tanto más puntos) y representa la máxima expresión de lucha por la conquista y la posesión de la pelota en un campo de rugby.
La meé abierta suele formarse cuando un jugador con la pelota es placado; sus compañeros vienen entonces a “limpiar” el balón, pasando un pie por encima de éste y obligando al equipo contrario a pasar por encima del jugador derribado y empujar a los contrarios para ganar la posesión de la pelota.
Sus normas básicas son:
Todos los jugadores que forman, se incorporan, o participan de un ruck no deben tener sus cabezas y hombros más bajos que sus caderas.
Un jugador que se incorpora a un ruck debe asirse a un compañero o a un oponente usando todo el brazo.
Colocar una mano sobre otro jugador en el ruck no constituye asirse.
Todos los jugadores que forman, se incorpora, o participan de un ruck deben estar sobre sus pies.ING
Los jugadores en un ruck deben intentar permanecer sobre sus pies.
Un jugador no debe caerse o arrodillarse intencionalmente en un ruck.
Un jugador no debe derrumbar intencionalmente un ruck.
Un jugador no debe saltar encima de un ruck.
Para sacar el balón del ruck con el pie, un jugador debe primero tratar de sobrepasar a los jugadores que se encuentran en el suelo. Si a pesar de esto sigue siendo obstaculizado, puede rascar el balón con su pie haciendo obligatoriamente un gesto de rastrillaje de delante hacia atrás.
En cambio, está totalmente prohibido hacer rucking lejos del balón o sobre un jugador adversario “caminando” por encima, incluso aunque estuviera fuera de juego
Un jugador ruckeando por la pelota no debe rastrillar intencionalmente a los jugadores en el suelo. Un jugador luchando por la pelota debe intentar pasar más allá de los jugadores en el suelo y no debe pisarlos intencionalmente. El jugador que rastrillea con el pie debe hacerlo cerca de la pelota.
Los jugadores no deben tocar la pelota con las manos en el ruck excepto después de un tackle si están sobre sus pies y tienen sus manos sobre la pelota antes que el ruck se haya formado.
Jugadores incorporándose o reincorporándose al ruck. Un jugador que se incorpora a un ruck debe hacerlo desde atrás del pie del último compañero en el ruck. El jugador puede incorporarse al lado de este último jugador. Si el jugador se incorpora al ruck del lado de sus oponentes, o delante del último compañero, el jugador está offside. Un jugador puede asirse a un jugador oponente siempre que el jugador no esté offside de otro modo.
En este gráfico se aprecian las posiciones desde donde se pueden incorporar los jugadores a un ruck.
Como hemos visto, esta jugada se produce en un punto de encuentro (normalmente un placaje) y solo son necesarios un jugador por equipo para que se produzca, el resto de los delanteros se suman o no al agrupamiento bajo la dirección del medio de melé con el objetivo de ganar el balón, pero hay otros habitantes en la melé abierta que debemos considerar:
    Los impuntuales. Estadísticamente, la gran mayoría de los golpes de castigo se producen por llegar tarde y entrar de mala manera al agrupamiento, es más, creo que todos los que vienen debajo de este apartado podrían agruparse en esta categoría. No seáis ese delantero que siempre llega tarde, acaba siendo un problema para todo el equipo.
          El inspector del ruck. Ese que empieza a mirar por donde está la pelota sin decidirse a entrar o salir de la melé abierta (ha llegado tarde fijo), normalmente estorba al medio de melé y si se decide a entrar lo hace con las manos (que listo) y provoca el golpe en contra.
     Los empujadores. Entran en el agrupamiento con las manos y parece que en lugar de jugar al rugby están intentando entrar en el metro en hora punta. En general estorban al que de verdad está luchando por el balón (resulta molesto que se apoyen en tu espalda). Normalmente han llegado, como siempre tarde.
     Los buceadores. Llegan a la abierta (tarde) y se tiran de forma aparatosa como si fuera una piscina. Puede que estén cansados, el caso es que, como hemos visto antes, esto también es golpe de castigo.
Por último, recordaros a todos que no es necesario ser delantero para entrar en un ruck, basta ser el que está cerca del balón en el punto de encuentro y querer conquistarlo y que no es necesario ser medio de mele para sacar el baón del ruck, basta ser el que esta fuera del agrupamiento, sobre sus dos pies y tiene la oportunidad de jugar el balón.


domingo, 18 de diciembre de 2011

La crónica del partido Escuala vs Liceo



Hemos jugado hoy un partido de los que se puede aprender mucho.

Se ha notado cierto desconcierto probablemente porque ha sido un partido celebrado en mitad de una serie de días de fiesta.

La hora ha sido muy buena pero bastantes jugadores han llegado tarde y andando, otros se han olvidado los protectores y alguno parecía que todavía no se había quitado el pijama.

Se ha notado que calentar “el coco” nos ha costado mucho más que de costumbre y como resultado hemos saltado al campo sin la habitual concentración que solemos tener. La  consecuencia ha sido que nos han metido 2 ensayos en los primeros 5 minutos.

La verdad es que se mascaba la tragedia pues Liceo tenía muy claro lo que tenía que hacer y lo estaba aplicando a la perfección.

Menos mal que 2 o 3 jugadores se han echado el equipo a la espalda y han empezado a mostrar al resto lo que significa jugar al rugby. El caso es que ha funcionado y poco a poco nos hemos empezado, CASI todos, a meter en el partido y a hacer lo que sabemos.

Al final nuestro dominio ha sido muy grande y aunque no hemos marcado muchos puntos por la gran y ordenada defensa de los del Liceo, si es cierto que hemos jugado casi todo el tiempo en su campo.
En definitiva ha sido un partido de menos a más en el que se ha demostrado que en el deporte de competición el aspecto mental es crítico.

Esta mañana 2-3 personas han podido resucitar a un equipo que sabe jugar al rugby pero que hoy no tenía ganas de hacerlo.

Si aspiramos a convertirnos en un equipo temido y respetado por nuestros rivales, cosa que podemos, cada jugador tiene que saltar al campo mentalizado para sufrir y dar lo mejor que tiene por el equipo desde el primer segundo.

Resumiría el mensaje que queremos trasladar hoy,  en MOTIVACION y MENTALIZACIÓN como algo esencial para marcar la diferencia.

Los partidos que nos quedan van a ser mucho más duros que los que hemos jugado hasta ahora y si el componente “mental” no lo trabajamos a conciencia y cada uno individualmente, no podremos  ser el equipo respetado que realmente podemos ser .

Por cierto, el resultado final fue 24 - 12

Foto partido Hortaleza


sábado, 17 de diciembre de 2011

Fotos entrenamiento seleccionador




























Después de unos días de inactividad motivado por toneladas de curro, os paso unas cuantas fotos del entrenamiento con el seleccionador

lunes, 5 de diciembre de 2011

Cronica del partido Escuela vs Hortaleza


De nuevo hemos visto un partido muy completo de la Escuela.
Los nuestros salieron al campo como suele ser habitual, concentrados y con ganas.
Estamos viendo el fruto de los entrenamientos de los viernes. Los jugadores asimilan mejor los aspectos posicionales del juego. Saben estar situados en el campo y cada vez es mas raro tener que colocar desde la banda a algún despistado. Saber jugar sin balón es muy importante y creo que estamos viendo progresos en ese aspecto.
Gran partido de la delantera especialmente de la primera línea que se está convirtiendo en pieza fundamental de nuestro juego. La segunda línea ha demostrado en otros partidos que puede dar un poco más intensidad a sus acciones que lo que vimos contra hortaleza. El medio de melé abrió con seguridad y rapidez a la línea que circuló casi todos los balones hasta las alas.  ¡Rugby champagne amigos ¡. Desde mi  punto de vista nos falta incorporar al menos dos delanteros más que tendrán que salir de algunos de los que ahora juegan en la línea.
Pero lo más interesante probablemente se produjo en la línea de tres cuartos. Decidimos que había que explorar las posibilidades que pensamos tienen algunos jugadores. Dicho y hecho. Cambiamos de posición al apertura, al back, al segundo centro, cambiamos algún delantero en la línea y a un tres cuartos en  la delantera, intercambiamos alas, el medio de melé, …… y todo salió bien pues nuestro estilo de juego siguió siendo el de siempre y nuestra intensidad y ritmo no bajaron. Aún más, estos cambios nos han demostrado que podemos tener más de una opción a la hora de plantear los partidos.
Conclusión ¡hay equipo, hay recambios para muchos puestos y hay estilo definido de juego!.
Saludos a todos

domingo, 4 de diciembre de 2011

EL PLACAJE


EL PLACAJE
El placaje, según las normas de la IRB, es la forma legal de derribar al portador del balón y tener opciones de recuperar la posesión, representa, más allá de esta definición y en palabras de uno de vuestros entrenadores, un “estado mental” que nos exige superar problemas afectivos relativos al contacto con el otro jugador y con el suelo. Forma parte de la esencia del Rugby y el que no le guste placar debe buscar otro deporte.

La ejecución correcta del placaje se orienta siempre a la seguridad tanto del placador como del placado durante el contacto, seguridad que implica:

  • -        Placar siempre por debajo de los hombros.
  • -        Mantener los ojos abiertos durante el placaje.
  • -        Colocar la cabeza a un lado del placado.
  • -        Mantener la espalda recta.
  • -        Girarse para caer encima del placado.

Se consideran tres fases referentes al placador, en la primera, o fase inicial, nos aproximamos al atacante. Hay que tener en cuenta que el ritmo de nuestra aproximación no debe ser uniforme:

  • -        El ritmo inicial debe ser lo más rápido posible (y todos a la vez, tres cuartos, el que no sube con su apertura está dejando huecos en la defensa) con objeto de llegar al contrario estático o cuando está empezando a correr con el balón y en cualquier caso sin que haya alcanzado la línea de ventaja.
  • -        Cuando estamos cerca del portador del balón, desaceleramos para acomodar nuestra carrera a la del atacante. Si vamos demasiado rápido, es fácil que nos haga una finta y nos deje atrás.
  • -        Si ya tenemos la seguridad del contacto, volvemos a acelerar para derribar al contrario.

En la segunda fase, la principal, materializamos el contacto. Aquí debemos tener en cuenta varias cuestiones.

  • -        El placaje debe dirigirse a la altura de la cintura al ser la parte “blanda” del cuerpo y la que menos se mueve cuando el jugador está en carrera. Para ello es importante fijar la mirada en esta parte y no en las piernas o la cabeza del contrario.
  • -        Al contrario se le frena con el hombro, no con el brazo (el que intenta placar con el brazo al final solo consigue “acariciar” al atacante), para ello buscamos una posición estable que nos permita oponer el propio cuerpo desplazándolo hacia el atacante, alineando nuestro hombro exterior con el hombro interior del defensor (no nos colocamos enfrente). Esto último debe hacernos reflexionar; cuando corremos de lado con el balón, facilitamos el placaje del defensa.
  • -        Abrazar con fuerza y  con los dos brazos al portador del balón mientras se le derriba.
  • -        Colocar la cabeza en la parte posterior del cuerpo.

En la fase final caemos girándonos encima del placado. Esta fase es la de recuperación del balón por lo que el placador debe levantarse antes que el placado para conseguir el objetivo final de un buen placaje, recuperar la posesión del balón.

Por último, en el placaje de espaldas, debemos intentar dar el último apoyo lo más cerca posible del adversario como en el placaje de frente o de lado y no cometer el error de perder el contacto con el suelo demasiado pronto.